¿Por qué cuesta tanto?

Si es tan valioso, ¿por que no se lo decimos a diario a la gente que realmente se lo merece?

Es una palabra que puede cambiar tantas cosas ...

Puede hacernos sonreir, puede hacernos llorar tanto de felicidad como de tristeza, e incluso puede hacernos cambiar miles de opiniones y volvernos locos.

Y es que no es solo una palabra que se diga y se pierda en el viento.

Es una palabra, que con salir de nuestra boca, acaricia los sentidos de la persona a la que va dirigida y queda siempre en el recuerdo.

Y que pasa, ¿por qué no se la decimos a las personas que lo merecen?

A esas personas de las que estamos enamorad@s.

Pero nos callamos...

Dejando así, escapar oportunidades, sueños, esperanzas...

Renunciando a la posibilidad, de que hubiera un querer mutuo.

Perdiendo así, tal vez también, a la persona.

Puede que pensemos que pierde intensidad por cada vez que lo decimos

Pensamos quizás, que cuantas menos veces se diga, más sentido y más sentimiento tendrá

Creo que posiblemente, cuando pensamos en eso, pensamos en el mal uso que se le da a esa palabra. Por la gente que va por ahí diciendo te quiero, sin saber aún lo que significa de verdad, o esos amigos y amigas que se pasan la vida por mensajes y vía msn diciendo te quiero, porque es facil de escribir, pero muy dificil de decir, por esa misma razón, porque hay que sentirla de verdad, para que sin más salga de tu boca.

No es algo premeditado.

¿Desde cuando dejamos de ser niños que expresaban sus sentimientos,

Para convertirnos en personas adultas, orgullosas y de piedra?

Besitos,
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